dimarts, 13 de maig del 2014

Bandeja de cupcakes florales

En muchas ocasiones, la culpa de que un postre tenga más o menos éxito depende de la presentación. A estos cupcakes quise darles un aire primaveral. Así que tirando de color y de flores, acabaron quedando así. 


Todos los cupcakes tenían bizcocho de chocolate, tierno y que casi se deshace en la boca. Para que quedara más jugoso les añadí un punto de jarabe de chocolate a unos y praliné de avellanas a los otros. 


En cuanto al frosting, había tres tipos diferentes: fresa, chocolate y praliné. 


Lo normal es tapar todo el bizcocho con la crema que se haya elegido. Pero para ser sinceros, muchas personas prefieren que los cupcakes no queden tan dulces y no sean empalagosos. Así que con un poco de fronting hay suficiente. 


Los "wrappers" y las etiquetas con lazos están expresamente hechas para la ocasión. Todo a mano...


Y así es cómo quedó la bandeja antes de que los invitados empezaran a servirse. Era todo un jardín de flores con un olor más que apetecible. 


Cupcakes praliné de avellana

Desde que una amiga me pidió que le pusiera praliné de avellana a un pastel de cumpleaños me he aficionado a este gusto. Y es que está buenísimo. 

 Lo utilizo como relleno directamente en el interior del bizcocho del cupcake y también mezclado con el resto de la "buttercream" para el frosting. Ése es el caso de estos 12 cupcakes que veis. El bizcocho era de chocolate y el resto, praliné de avellana.


La compañera que me los encargó me comentó que había quedado de lujo. Pues nosotros encantados de que así sea. 


Bizcocho balón de fútbol

De nuevo os traigo un pastel en forma de balón. La curiosidad que éste presenta es que al destinatario no le gusta lo dulce, ni el chocolate. Así que me pidieron un bizcocho de vainilla decorado con fondant. Estoy tan acostumbrado a las cremas de diferentes gustos entre las capas del bizcocho y al ganache de chocolate para darle la forma perfecta al pastel que se me hacía hasta raro. Peró así quedó.


Hice un bizcocho "buttermilk" que queda muy tierno y jugoso. Le puse un toque de vainilla para que no quedara tan insulso y nada más. Se trata de un bizcocho que dura muchos días en perfecto estado. 


El balón está pintado con aerógrafo y decorado con fondant negro. En la parte delantera añadí el nombre del protagonista y los años que cumplía. 


Y el escudo del club preferido de Marc no podía faltar. Se trata del "Gimnàstic" de Tarragona. Así quedó este nuevo pastel futbolero. 


dilluns, 12 de maig del 2014

Pastel flor fuscia

Hay ocasiones en las que se puede obtener un pastel impactante y trabajado sin necesidad de grandes volúmenes, sin necesidad de apilar múltiples pisos de bizcocho. El pastel que hoy os traigo se compone de una única planta. Ahhhh, y una enorme flor. 


El pastel iba dirigido a Laia, una amiga que cumplía 30 años. Está muy acostumbrada a ver pasteles muy altos. Le he hecho castillos de princesas para sus sobrinas, y pasteles de varios pisos para su hijo. Así que la mejor manera de sorprenderla era con un pastel de una sola planta pero con colores llamativos y atrevidos. 


Vi una idea muy similar por internet (no me escondo nunca) y me gustó. Hacía tiempo que la quería utilizar haciendo mi propia versión. Y aquí está. El pastel está pintado de negro con aerógrafo y le enganché estas cenefas de fondant de color fucsia pintadas de dorado. La parte más llamativa es la flor que lo decora.


La flor está hecha utilizando dos materiales: goma eva y pasta de goma. Los pétalos de la flor son de goma eva, trabajada con la plancha y enganchada una tras otra con alambres. El resto es pasta de modelar y por tanto, comestible. 


No es la primera vez que utilizo este material para hacer flores. Considero que es mucho más agradecido y duradero que la pasta de azúcar. Y encima no hay que sufrir por si se rompe.  


Y así quedó este pastel listo para ser entregado. Lo más importante es que Laia quedó sorprendida y encantada con su pastel. Muchas felicidades también desde aquí. 


Pastel enfermera

Nunca había hecho un pastel con esta temática: un pastel dirigido a una enfermera. Así que pensé que el color rojo debía estar bien presente, junto con el blanco y el negro. Así quedó. 


Coloqué el pastel sobre una plantaforma de goma eva negra y roja. El pastel simula la bata de la enfermera y encima encontramos la cofia con la cruz roja. Justo delante están los cupcakes, decorados con tiritas, fonendos y termómetros, impresos en fondant. 


El pastel era un bizcocho de chocolate, con praliné de avellanas entre las capas y ganache de chocolate negro cubriéndolo todo. 


Según me contaron después, la destinataria quedó impactada con el conjunto y llegó hasta a emocionarse. 


Así es cómo quedó el pastel envuelto y listo para ser entregado. 


Pastel coche famosos

El bizcocho en forma de coche que os traigo no iba dirigido a ningún niño o niña. Resulta que su destinataria era una chica que estrenaba carnet de conducir y su madrina quería celebrarlo con este pastel-mona de pascua. 


Coloqué el coche sobre esta carretera plateada y lo pinté con aerógrafo. Le quise dar un aspecto sencillo e ingenuo. La parte importante vendría por los personajes de las ventanas.


La compañera de trabajo que me pidió el pastel quería que en las ventanas del vehículo aparecieran los personajes favoritos de la destinataria. Y aquí están. Dentro encontramos bizcocho de chocolate, muy esponjoso y tierno, con crema de praliné de avellanas entre las capas y ganache de chocolate negro. 

 

Aquí se aprecian mejor las caras de los famosos. Todos ellos estaban impresos en folios de fondant. Por lo tanto, eran totalmente comestibles. 


 Y aquí tenemos una vista superior del pastel. Sabemos que le gustó, y mucho.


diumenge, 4 de maig del 2014

Mona pollitos

Un año más, no podía faltar en este blog la mona que un servidor le hace a su ahijada, Núria. Ya no es ninguna niña y por eso ya no pide una temática concreta para decorar el pastel. Así que tiré de imaginación y acabó quedando de esta manera. 


En realidad se trataba más de un expositor que de un pastel. Lo único comestible eran los huevos de chocolate y los siete cupcakes que distribuí en varios pisos. Básicamente se trataba de presentar algo espectacular teniendo en cuenta que el pastel debía recorrer muchos quilómetros y debía servirse en un restaurante en el que ya se habría comido un postre. 


Los colores predominantes son el rojo, el negro y el blanco. La casita de pájaros queda perfecta con el entorno. Los pollitos son los únicos que rompen un poco con el resto pero quedan bien. 


Los cupcakes eran de bizcocho de chocolate, relleno de chocolate y con una crema de avellana por encima. Los acabé de decorar poniéndole estos dos huevos pequeños. 


El conjunto quedó muy llamativo y contribuyó a que la fiesta fuera un poco más redonda. De eso se trata, de hacer feliz a todo el mundo.