En esta ocasión el pastel que os presento era un regalo que quería hacerle a un vecino y amigo que cumplía 27 años. Pensado en él quise hacer algo elegante pero juvenil.
Es por ello que quise utilizar sólo tres colores: blanco, negro y naranja. El piso superior era completamente blanco, con un cinta de color negro. Estaba coronado por las letras que contenían el nombre del protagonista "Oriol".
Los otros dos pisos también son en blanco y negro pero combinados de forma diferente. Y la nota de color la aportan estas grandes velas naranjas. Por dentro encontramos bizcocho de chocolate con crema de praliné de avellanas y ganache de chocolate negro cubriéndolo todo. Por lo visto gustó mucho a toda la família, tanto el exterior como el interior. Pues nosotros encantados de haberle podido hacer el pastel.