Ha pasado ya un año desde que empezó la andadura con el blog, facebook y BarretoCakes en general. Hasta entonces había hecho todo tipo de postres que quedaban únicamente en el ámbito familiar. Tampoco hacía fotografías, cosa de la que ahora me arrepiento. Pero fue la publicación del pastel de mi hija Marina lo que hizo que mucha gente, amigos y familiares decidieran encargarme los pasteles para sus fiestas y aniversarios. Un año después me vuelvo a encontrar en la misma situación: el pastel de cumpleaños de mi hija. En esta ocasión he cambiado de temática. De hecho, ella misma ha escogido un pastel de pitufos. Pues aquí teneis el resultado.
Sobre una base de porexpan ambientada como una aldea pitufa, coloqué este pastel compuesto de dos pisos. En su interior había bizcocho de chocolate con ganache de chocolate negro y "buttercream" de turrón. Es una receta que te proporciona un bizcocho muy esponjoso y jugoso. Perfecto para convencer a todos aquellos que dicen que estos pasteles de tradición anglosajona son más secos y duros. Nada más lejos de la realidad.
La decoración del pastel está hecha con fondant de diferentes colores. El tejado de la casa debía ser rojo, com si de una seta se tratara. La base es amarillenta y envejecida con colorantes en polvo. Las flores están hechas con pasta para modelar. Con una bandeja con tantos detalles, el pastel no podía ser mucho más cargado.
En este caso lo realmente difícil fue hacer las fotografías. Estuve una semana preparando la base, los adornos y el pastel en general. Pero debía hacerlo de forma discreta para que la cumpleañera no lo viera. Así que tuve que instalarlo en secreto en una habitación sin luz natural y así es como quedaron las fotografías. Como siempre comento, hacer buenas fotos es mi asignatura pendiente.