El pastel que hoy os presento es un encargo de una persona que había asistido a una fiesta en la que se sirvió un pastel de BarretoCAKES. Yo me acuerdo de aquel pastel perfectamente, porque ha sido el único que ha salido de la cocina sin ser fotografiado. No me hizo ninguna gracia después del trabajo que comportó pero, por lo menos, pude contar con las fotos que hicieron los invitados con sus teléfonos. Pues este encargo tenía que ser una moto; derecha, tumbada, daba igual. Me dijeron la marca y me pasaron una fotografía del modelo exacto. Así quedó el pastel.
Partiendo de un bizcocho de chocolate fuí recortando la silueta de la moto. Entre medio puse praliné de avellanas, tal y como me habían pedido. Me sobró un poco y estaba buenísimo. Lo cubrí de ganache de chocolate negro y fuí aplicándole fondant según el modelo original.
La verdad es que la moto tiene muchísimos detalles y sólo con copiar unos cuantos ya le dá al pastel el realismo que necesita. Cuando vinieron a buscarlo, lo primero que dijeron fué: "es igual que la moto original".
El pastel era sólo para 10 personas así que su tamaño no era demasiado grande. Para que quedara más espectacular lo puse en esta bandeja plateada y con este marco que parece delimitar lo más interesante del conjunto: la moto.