dimarts, 22 d’abril del 2014

Mona Mariona

Otra de las monas que me han pedido amigos y familia para este lunes de pascua ha sido la que hoy os enseño. La destinataria era mi sobrina Mariona y no quería ninguna temática concreta. Sabemos que le gustan los brillos. Así que tirando de imaginación y de mucha purpurina la cosa quedó así. Muy brillante. 


A partir de la inspiración que me proporcionaron estos copos de nieve, pensé en montar todo el conjunto en azul, blanco y dorado. El piso inferior está cubierto con goma eva con purpurina. En el superior encontramos el pastel. Está pintado con aerógrafo y utilicé una técnica especial para simular que del centro emergían estos huevos de chocolate. 


Por dentro se trataba de un bizcocho de chocolate, con praliné de avellana y crema de avellana entre las capas y ganache de chocolate negro cubriéndolo todo. 


Y aquí está la visión superior del pastel en la que se aprecia el efecto de "estallido" y los huevos de chocolate azules. Una mona con mucho glamour para Mariona. 


Mona nieve

Ferrán intenta escaparse a la nieve siempre que el tiempo se lo permite. Se está aficionando cada més más a esto del "snowboard" (creo que se llama así, no soy muy de nieve, la verdad) y sus padres querían que la mona del lunes de pascua tuviera esa temática. Así quedó. 


El pastel constaba de una plancha delantera cubierta de fondant y pintada con aerógrafo de color azul. La idea era que simulara una montaña cubierta de nieve, con sus abetos y su tabla de esquiar. Detrás encontramos el pastel, pintado de azul y coronado por estos huevos de chocolate. 


Por dentro se trataba de un bizcocho de chocolate con crema de avellana entre las capas y cubierto con ganache de chocolate negro.  Muy azul por fuera y muy negro chocolate por dentro.




Y así es como quedó envuelto y listo para ser entregado. Horas más tarde se pusieron en contacto conmigo para decirme que tanto el diseño del pastel como el interior les había encantado. Así que otra satisfacción personal más para un servidor... 


Mona manifestación

La mona que hoy os presento contó con la ayuda de Carina, que me hizo el diseño del pastel que quería regalarle a su ahijado para el lunes de pascua. Me pareció muy original y una gran idea. Ahora sólo faltaba hacerlo realidad. Así quedó. 


Sobre el papel me pareció muy buena idea pero faltaba ver el montaje final. El pastel era un bizcocho de chocolate con crema de chocolate entre las capas y ganache cubriéndolo todo. Le puse una fina capa de fondant y lo pinté de amarillo con aerógrafo. Por último le añadí las cuatro barras rojas con tiras de fondant. 


Los asistentes a la manifestación son los típicos huevos de chocolate de cualquier mona de pascua. Todos juntos, con sus diferentes tamaños y sus ojitos de glasa real dan la sensación que pretendía: una manifestación de huevos de chocolate. 


Las banderas están hechas con goma eva. Ya sabeis que me encanta trabajar con muchos materiales al mismo tiempo y complementarlos de la mejor manera. Pues así quedó esta original mona. Seguro que no has visto ninguna igual. 


Cake pops Tània

Mi vecina Tània llegaba a sus 15 añitos y quería compartir la celebración con todos sus amigos. Así que le hice unos "cake pops" de chocolate muy elegantes y femeninos. Son éstos. 


Encontré estas diminutas perlas de color rosa y pensé que podían ser el elemento ideal para la decoración de estos cake pops. Van a juego con la bandeja, que también tiene su trabajo. 


Aquí se aprecia el detalle de las perlitas rosas. 


Y así es como quedó la bandeja lista para ser entregada. Espero que Tània quedara más que bien con sus amigos. 15 años no se cumplen cada día. 


dilluns, 7 d’abril del 2014

Mona Frozen

Otra de las monas que familia y amigos me han pedido para esta semana santa ha sido sobre la última película de la factoria Disney: Frozen. De hecho, es una película increíble, con unos dibujos fantásticos y una banda sonora que hace una salto respecto las anteriores películas Disney. Se trata de un musical que perfectamente podría ser llevado a un teatro y de unas melodías frescas y nada pastelosas. Y hablando de pasteles, aquí lo teneis. 


El trabajo de "marquetería" ha aportado mucho a este pastel. Ya veis que la bandeja es muy compleja y quiere representar el castillo de hielo que Elsa se construye para estar apartada del mundo y no ser un peligro para nadie. La escalera, el balcón... son elementos que aparecen en la película. 


Y ahí tenemos también a los personajes: Elsa, Anna y el muñeco de nieve Olaf. Están impresos en cartulina y colocados en el lugar adecuado para que todo el conjunto tenga sentido. Y, ¿qué os parece la nieve? Siguiendo técnicas belenísticas, está hecha con espuma de poliestireno y pintada de blanco y algo de azul. 


En cuanto al pastel, se trataba de un bizcocho de vainilla, mojado en un poco de almíbar y "buttercream" con aroma de fresa entre las capas y cubriéndolo todo. En este caso, el pastel estaba hecho con la técnica del "rainbow cake", y cada capa era de un color azul diferente. Se creaba un degradado de azul intenso a blanco que quedaba muy bien al cortar las porciones.


Aquí más fotografías de los adornos no comestibles. 


Y en la parte inferior de la bandeja no podían faltar los huevos de chocolate. Está claro que al tratarse de una mona de pascua, estos elementos tienen que estar presentes. Y en cuanto a las plumas, lo mismo. 



Pues así es como quedó el pastel sobre la película Frozen. Y lo mejor de todo fue lo que disfruté pensándolo, construyéndolo y viendo el resultado final. 


Mona princesa

Seguimos investigando en el modelado de figuras con fondant. En este caso mi compañera Mònica quería una princesa para su ahijada. La intención era regalarle el pastel para el Lunes de pascua. Así, además de princesa, el pastel debía estar acompañado de sus plumas rosas y sus huevos de chocolate. 


Con la ayuda de goma eva monté esta brillante base. Se trataba de darle un aspecto llamativo y principesco que captara la atención de la destinataria. 


Sobre el pastel coloqué estos huevos de chocolate y estas plumas rosas que dejan bien claro que se trara de una mona de pascua. Por dentro había bizcocho de chocolate, mojado en almíbar de vainilla, crema de fresa entre las capas y ganache de chocolate negro envolviéndolo todo. Por último, una fina capa de fondant blanco sirve para poder hacer la decoración. 


Y aquí tenemos la princesa. Seguimos investigando en este campo. Está hecha con fondant endurecido con polvos CMC. La parte rosa del vestido está pintada con aerógrafo y el bordado blanco es glasa real. 


El conjunto de huevos de chocolate que coloqué justo en la parte delantera de la bandeja le da el toque de "mona" al pastel. Lástima que sólo tenga sentido ponerlos en esta época del año. 


Y así es como quedó el pastel listo para ser entregado. Espero que la destinataria quedara contenta con su mona. Por lo menos, original y sorprendente lo era. 


dilluns, 31 de març del 2014

Pastel Machu Picchu

Para el 50 cumpleños de Laura, sus amigos, unos familiares míos, querían regalarle un pastel que tuviera mucho que ver con el regalo estrella de la celebración: un viaje para conocer en directo las ruinas del Machu Picchu. A la fiesta asistían unas 70 personas y optaron por la postura más práctica: un expositor lleno de cupcakes y coronado por un pequeño pastel. Todo  debía girar entorno a la temátia de estas ruinas y estas montañas. Así quedó. 


El color del expositor tenía que ser verde, como el color de la hierba que rodea estas ruinas. Está pintado con aerógrafo para proporcionar algunas sombras al conjunto. También le enganché pequeñas piedras hechas con goma eva de color marron. A partir de ahí me puse a montar la parte superior, el pastel.


Me gustó la idea de hacer unas montañas que sobresalieran del tambor del pastel. Las cubrí con fondant y glasa real verde y las pinté con aerógrafo en tonos marrones y verdes. Detrás de las montañas encontramos un primer piso de pastel en color negro para que destacaran las montañas. Y encima puse otro piso de pastel, cubierto con fondant blanco y con más montañas pintadas, en este caso dando la sensación de que están más lejos. Usando una técnica belenística, pinté la montañas más lejanas en color violeta, el cielo azul y las montañas más próximas en verde. 


Y en cuanto a los cupcakes, todos iban envueltos con unos "wrappers" personalizados para la ocasión. Por lo visto, la protagonista de la fiesta colabora en infinidad de entidades sociales y sus amigos querían que eso también quedara reflejado en el pastel. Enganché cada uno de los logotipos sobre el "wrapper" marrón. 


Para los "cupcakes" opté por tres gustos diferentes: fresa, chocolate y naranja. Los de chocolate estaban decorados con virutas de chocolate negro, los de fresa con pequeñas nuves de azúcar y los de naranja con perlas del mismo color.


Aquí se aprecia el detalle de los "cupcakes" de fresa.


Y así es cómo quedó este megaproyecto del expositor del Machu Picchu. Espero que Laura quedara contenta.